El alcalde de Tuluá, Gustavo Adolfo Vélez Roman, presentó ante el Concejo Municipal un proyecto de acuerdo que busca crear una nueva contribución para los ciudadanos: la Tasa Municipal de Tránsito, un tributo anual con el que se financiaría la implementación y operación del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) eléctrico.
Según el documento técnico, los recursos recaudados se destinarán en su totalidad al Fondo de Estabilización Tarifaria y Subvención (FET), con el propósito de garantizar la sostenibilidad del sistema y promover una movilidad más limpia. Sin embargo, el proyecto ha generado inquietud entre algunos sectores, al representar un nuevo cobro obligatorio para los tulueños propietarios de vehículos y motocicletas.
De acuerdo con la propuesta, las tarifas serían anuales y se ajustarían cada año con base en la UVT vigente:
• Motocicletas: 0,53 UVT
• Vehículos particulares: 0,88 UVT
• Carga, buses y remolques: 1,12 UVT
El costo técnico total para 2025 asciende a 94.952 UVT, equivalente a unos 4.700 millones de pesos, y el cobro se aplicaría a partir del 1 de enero de 2026.
La alcaldía argumenta que la medida sigue ejemplos de otras ciudades donde se han implementado tasas de movilidad para modernizar el transporte público y reducir emisiones contaminantes. “Necesitamos una ruta clara hacia la movilidad eléctrica y una financiación sostenible”, señaló el alcalde, al defender la propuesta.
Sin embargo, algunos concejales advierten que este nuevo impuesto podría afectar el bolsillo de los ciudadanos. “Antes de gravar más a la ciudadanía, debemos revisar su impacto real y considerar alternativas de financiamiento más eficientes”, expresó un portavoz crítico de la iniciativa.
El Concejo Municipal dio inicio al estudio del proyecto, con la posibilidad de realizar consultas ciudadanas antes de la votación final. Se espera que durante el debate se analicen los impactos económicos sobre hogares y empresas, así como posibles exenciones o medidas transitorias.
De aprobarse, el nuevo impuesto entraría en vigencia el próximo año, con una implementación gradual y monitoreo anual de resultados y rendición de cuentas ante el Concejo y la ciudadanía.











