La iniciativa gira en torno a la promoción del bienestar emocional y la salud mental en los espacios escolares, fortaleciendo la empatía, el autocuidado y la comunicación asertiva entre estudiantes, docentes y las familias. Con la finalidad de fortalecer este programa el Ministerio de Educación Nacional ha promovido conversatorios y estrategias bajo este enfoque para fomentar la creación de entornos escolares más sanos y protectores.
Las tareas también se asocian con el trabajo de organizaciones que apoyan a poblaciones vulnerables a través de programas en los centros educativos y comunidades. La labor trasciende el aula, pues dinamizan las Escuelas de Padres, promueven la educación para la paz, la reconciliación, la convivencia pacífica, y la justicia restaurativa, y articulan la escuela con sectores como salud, justicia y cultura.











