Es la primera vez que el país registra un número tan alto de precandidatos por este mecanismo.
Los comités deberán entregar antes del 17 de diciembre un mínimo de 635.216 firmas válidas, equivalentes al 3 % de los votos obtenidos en la primera vuelta presidencial de 2022. La entidad deberá verificar cerca de 59 millones de rúbricas hasta el 21 de enero del próximo año, para determinar qué campañas cumplen los requisitos.
Entre los nombres más visibles en la contienda figuran Mauricio Lizcano, Claudia López, Juan Daniel Oviedo, David Luna, Santiago Botero, Vicky Dávila, Mauricio Cárdenas, Daniel Palacios, Juan Carlos Cárdenas, Héctor Olimpo, Aníbal Gaviria y Juan Guillermo Zuluaga, entre otros. Un ausente notable es Daniel Quintero, a quien la Registraduría le negó la inscripción por haber participado en la consulta del Pacto Histórico.
Un proceso electoral marcado por tensiones y alertas de seguridad
El ambiente político llega cargado de alianzas, rupturas y debates internos en todos los sectores. La izquierda ya definió su carta presidencial con Iván Cepeda, mientras en la derecha continúan las discusiones sobre quién representará ese espectro del electorado.
A este complejo panorama se suma la preocupación por la seguridad del proceso electoral. El registrador nacional, Hernán Penagos, advirtió que el incremento de los grupos armados ilegales y los recientes ataques terroristas en diversas regiones pueden afectar la tranquilidad del país durante la campaña.
“La seguridad para unas elecciones libres y justas debe ser garantizada por el Gobierno nacional a través de su Ministerio de Defensa y su cúpula militar”, señaló Penagos, insistiendo en que la transparencia del proceso no depende únicamente de la Registraduría, sino de todos los estamentos del Estado.
Con más de 90 aspiraciones en marcha y un clima político en ebullición, Colombia se prepara para una de las contiendas presidenciales más competidas y vigiladas de su historia reciente.










