Esa enfermedad es el dengue tradicional y grave que sigue manteniendo cifras elevadas en los diferentes municipios del departamento.
De acuerdo con las cifras oficiales, hasta el 31 de marzo pasado en el departamento fueron notificados 2.625 casos de dengue, situación que mantiene en alerta a las autoridades de salud debido a la confusión que pueden generar sus síntomas con los del coronavirus.
“El dengue es una enfermedad en la que su lucha es un asunto individual, familiar y comunitario, todos debemos estar atentos a los criaderos de dengue y los signos de alarma”, dijo la secretaria Departamental de Salud, María Cristina Lesmes.
¿Cómo le va a Tuluá?
Según las cifras que maneja la Secretaría de Salud de Tuluá, en la semana 13 del perfil epidemiológico la reducción en el número de casos está por el orden del 80% teniendo la afectación más baja de los últimos años.
«El 2020 fue un año complejo porque el dengue tuvo características de epidemia, pero gracias a las acciones desarrolladas desde la administración municiplal pudimos ponerle freno», dijo John Jairo Aguirre Castaño, titular de ese despacho.
Para el funcionario, las tareas de fumigación espacial, el control larvario en los sumideros y las campañas de sensibilización sobre la importancia de eliminar los focos que propician el crecimiento del zancudo transmisor del dengue, dieron como resultado que hoy en el contexto del Valle del Cauca, Tuluá tenga una baja incidencia estadística.