Erika Andrea, nació en El Dovio pero el arbitraje la llevó a instalarse en el municipio de Zarzal (Valle) donde se vinculó al Colegio de Árbitros, que dirige el reconocido exarbitro Fifa Luis Sánchez, recibió la mejor instrucción teórica, práctica y física necesaria para luego ser tenida en cuenta por la Liga Vallecaucana de Árbitros y así dirigir los partidos de la Liga Profesional Femenina que organiza la Dimayor.
Erika, debutó como asistente el 24 de febrero de 2018 en el compromiso entre América y el Atlétic, mientras que profesionalmente su partido de debut fue en el 2019 cuando dirigió el encuentro entre Cortuluá y el Deportivo Cali. Fue la juez del partido entre América y el Deportivo Cali femenino que definió el título de campeón del 2022.
La edad para ser árbitro profesional femenino es 25 años, mientras que para ser asistente solamente debe tener 23.
Erika admira profesionalmente a María Victoria Daza, de Norte de Santander, Viviana Muñoz, del Valle del Cauca y a Jenny Arias y Paula Home, de Bogotá.
Hasta ahora el trato y el respeto que ha recibido de las jugadoras profesionales de fútbol en cada uno de los partidos que ha dirigido siempre ha sido el mejor.
La jueza invita a las jóvenes para que se vinculen al Colegio de Árbitros de Fútbol de Zarzal y tengan la oportunidad de enrutarse en una profesión emocionante.
Mayra Alejandra
Mayra Alejandra Sánchez González, oriunda de Zarzal, es Licenciada en Educación Física de la Uceva, promoción del 2013 y actualmente es la administradora del parque recreación de Zarzal.
Mayra, se formó hace 16 años en el Colegio de Árbitros de Zarzal que dirige su hermano, el exjuez FIFA Luis Sánchez y desde el 2016 ha venido dirigiendo los suramericanos sub 17 en Venezuela, Ecuador, Copa Libertadores en Brasil y Suramericano sub 20 en Argentina.
Su éxito en el arbitraje se debe a la disciplina, constancia, preparación física, teórica y dedicación y como figura pública ser admirada dentro y fuera de la cancha.
Le encanta dirigir el fútbol infantil, aunque los padres de familia sean los más difíciles de controlar. Su mayor objetivo es ser central en un campeonato mundial de fútbol femenino.