En su intervención, González Bermudez destacó las acciones que se han desarrollado a lo largo del último año y en el que han trabajado de manera mancomunada la entidad cameral, la alcaldía local y otras entidades del sector privado.
Precisó el líder gremial, que desde el gobierno municipal se ha trabajado en diferentes estrategias en procura de aliviar la situación económica de los comerciantes y empresarios, acciones que aunque importantes se quedan cortas por lo aguda que resulta la crisis.
DATO: El 25 de mayo resultaron afectados 45 establecimientos, 275 empleos, y las pérdidas ascienden a $ 2 mil millones.
Reconoció que la caótica situación que ya venían arrastrando por la pandemia del covid 19 se sumó el paro nacional y de manera especial los bloqueos que se registraron en las vías de Tuluá y el centro y norte del Valle.
«Los bloqueos en las entradas norte y sur del municipio generaron un desabastecimiento nunca antes visto, lo que encareció los productos y de paso hizo que pequeñas empresas agravaran la problemática, obligando al cierre y por ende aumentando el desempleo» precisó.
La reapertura
Frente a las críticas que han surgido ante la decisión de aperturar la vida nocturna en estos momentos, cuando el pico de la pandemia está en su parte más alta, el presidente de la Cámara precisó que se apeló al espíritu colaborativo de los comerciantes y se espera que haya una respuesta positiva, pero ellos saben que depende de los resultados que arrojen estos 15 días la permanencia de la reapertura.
A reactivar la esperanza
Al cierre de su intervención, Miguel Ángel González dijo que tras los hechos vandálicos del 25 de mayo quedó una sensación de tristeza, angustia y decepción y por esa razón trabajan ahora en una estrategia que involucre a todos los estamentos a recuperar la esperanza y la gente vuelva a comprar en la gran manzana comercial.
