Esta semana que está a punto de terminar, para algunos, el tema de conversación y de mofa ha sido la respuesta que le dio el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, estructurador de la Reforma Tributaria que estudia el Congreso, a la periodista Vicky Dávila, donde manifestó que «una docena de huevos costaba 1.800 pesos»…¡Plop!
Pero los que más se han burlado por el desconocimiento de los valores de la canasta familiar de Carrasquilla, han sido los hombres…¡Añañaiii!
Y me parece injusto, porque a muchos de nosotros nos pasa lo mismo, desconocemos cuánto vale una libra de arroz, de sal, o azúcar, pero lo bueno, es que no somos ministros…¡Que levante la mano el que sepa!
Pero eso sí, si nos preguntan cuánto cuesta una caneca, una botella o una garrafa de Blanco del Valle, sabemos cuánto vale en la tienda de la esquina, en la licorera o en el supermercado… ¡Así que dejen de joder con Carrasquilla, pues!
Tratando de salir de la pandemia, el pasado martes la naturaleza nos llamó la atención con un violento aguacero, acompañado de un tremendo ventarrón, que azotó varios sectores de Tuluá, tanto que varios árboles se vinieron al piso obstaculizando las vías y, algunos barrios se quedaron sin energía por la caída de los postes. Un buen número de familias tuvieron que amanecer en casas de sus amigos…¡Noche para olvidar!
Nuevamente quedó al descubierto que en la Villa de Cespedes no existe una política ambiental para sembrar los árboles en los separadores de las vías, como es el caso de la transversal 12, donde varios de ellos se cayeron la noche del martes, porque sus raíces no tenían el anclaje suficiente para sostenerse…¡Y lo grave del cuento, es que todavía quedan varios en las mismas condiciones y las ventiscas no paran!
Sería muy oportuno revisar todas esas terrazas que se construyen en las casas de dos y tres pisos, a veces rudimentariamente, porque el martes, con el fuerte viento, una de ellas cayó sobre la casa del vecino causándole daños materiales. Gracias a Dios no hubo lesionados.
Preguntas pendejas. ¿Los encargados del tránsito local estarán enterados que desde hace varias semanas se vienen presentando piques de motociclistas, en horas de la noche, en el tramo comprendido entre el puente del río Morales, en la transversal 12, hasta el nuevo Terminal de Transportes?
¿Será que las empresas estarán interesadas en comprar las vacunas contra el covid-19 para aplicársela gratis a sus empleados, ahora que la situación económica de muchas de ellas no da más?
¿Cuándo será que los congresistas hablarán de bajarse los millonarios salarios para «contribuir» con la economía del país?
¿Usted fue uno de los que le creyó a Juan Manuel Santos cuando en su campaña a la presidencia dijo en un debate con Mockus «que firmaría en mármol o en piedra que no subiría los impuestos?
¿Será verdad, mentira o chisme que en Tuluá no existen las 600 carretillas que están en el censo oficial y que le están exigiendo al gobierno de JJ Gómez una serie de estímulos para sus propietarios?
¿Tendrá permiso un lavadero de motos que viene funcionando en el barrio Céspedes y que utiliza el andén y parte de la calle para trabajar?
¿Cuál será la razón para que los celulares de los cuadrantes casi nunca los contesten. ¡Queja de los habitantes del occidente tulueño!
¿Usted también se quedó sin señal de Tigo, Claro o Movistar después del vendaval del martes y todavía está incomunicado?
Varias inquietudes nos llegaron esta semana a nuestro WhatsApp sobre el espacio público. Una persona con limitaciones físicas y que se moviliza en silla de ruedas, se queja porque le es imposible hacerlo por la carrera 30 entre las calles 26 y 21, debido a que los andenes están ocupados con artículos que venden los establecimientos comerciales ubicados en ese lugar y para el mantenimiento de vehículos.
Es así como para desplazarse a su casa, en el barrio Villanueva, tiene que usar la vía donde los carros han estado a punto de atropellarlo…¡Esta queja no es nueva, pero nadie le para bolas!
Otra queja sobre la invasión del espacio público nos llega de los usuarios de la carrera 40 que viven en los barrios San Benito y El Jazmín. El cual uso de la carrera 40, que no tiene andenes para los peatones, los está obligando a movilizarse por la vía destinada a los vehículos debido a que la mayoría de los comerciantes han encerrado con vallas, materas y cintas el espacio frente a su negocio para que los conductores de los tractocamiones no les tapen la visibilidad de su establecimiento comercial…¿Y las autoridades qué están haciendo al respecto?
Los más grave del caso, es que al no tener espacio los tractomuleros estacionan sus vehículos en la mitad de la vía al lado y lado de la misma, causando en la mayoría de las veces, trancones a cualquier hora del día…¿Quién controla la invasión del espacio público?
«Hasta que los muertos no sean tus muertos» no te tomarás en serio la gravedad del covid-19″, manifestó el personal médico de un hospital privado de Uruguay, el país suramericano que pasó de ser un modelo en la gestión de la pandemia a liderar los rankings de contagios y muertes recientes por la enfermedad en términos relativos. «La gente lamentablemente no toma conciencia»…¡Lamentablemente eso también nos está pasando a nosotros!
¡Ponete el tapabocas, ve!…Campaña de EL TABLOIDE.
…¡Qué peligro vivir al lado de esas terrazas!
Sabía usted…que Colombia es el tercer país con más «sugar daddy» en la región latinoamericana. Sugar Daddy, son hombres, con mayoría de edad, que aceptan cambiar relaciones sexuales con gente joven por dinero, viajes y lujos. Solo nos ganan México y Brasil…¡En léxico chibchombiano, son los llamados «lecheros»!
