En el mes de junio la alcaldía municipal de Tuluá deberá presentar a instancias de la Comisión de Moralidad Pública del Valle del Cauca las acciones que pondrá en marcha para reactivar la construcción del Centro de Atención y Bienestar Animal, proyecto que se encuentra paralizado desde hace más de 6 años.
Ese organismo que, liderado por la Contraloría Departamental y del cual hacen parte sus similares del orden municipal, la Fiscalía, Procuraduría y Defensoría del Pueblo, le sigue la pista a esta obra que está catalogada como un elefante blanco.
De acuerdo con la información entregado por la contralora departamental, Ligia Estela Chávez, en la obra inconclusa se han invertido recursos cercanos a los 100 millones de pesos, pero el balance es nulo.
Justamente esa comisión, en reunión cumplida en Tuluá recientemente, escuchó al alcalde Gustavo Vélez, quien asumió el compromiso de entregar un informe detallado sobre el particular en el mes entrante en aras de echar andar la obra de nuevo.
«No recibimos nada»
Consultado sobre el tema, el ex alcalde John Jairo Gómez Aguirre manifestó a EL TABLOIDE que ese es uno de los proyectos que su administración puso en conocimiento de los entes de control, pues desde su inicio estuvo lleno de irregularidades y precisó que desconoce el estado actual de las investigaciones.
Aclaró que su gobierno no invirtió recursos en la obra porque el terreno es inundable y la comunidad del entorno mostró oposición a la iniciativa por los efectos colaterales que se generaban.
«Lo que estamos trabajando es para lograr destrabar el proceso y que los animales tengan un lugar digno para su atención y protección», dijo por su parte Harold Fernando Cerquera, contralor de Tuluá.