Cuando ocurre un caso de suicidio me pregunto si ¿la persona fue valiente o por el contrario fue cobarde? Y lejos de juzgar, hago esa reflexión porque con todo lo que pasa a veces el planeta se siente invivible, y a veces creemos que no hallamos salidas a los problemas que vivimos, en ese sentido se podría entender la filosofía de alguien que tome una decisión de tal magnitud. Valientes o cobardes, lo obscuro queda para los familiares y amigos cercanos que quedan con un mar de preguntas sin respuestas.
Este mes se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, esta, sigue siendo una de las principales causas de muerte en el mundo, pues cada año más de 720 mil personas fallecen por esta razón.
En el 2019, más personas murieron por suicidio que por VIH, paludismo, cáncer de mama, guerras u homicidios; es la tercera causa de defunción entre personas de 15 a 29 años. Más del 70% de los suicidios ocurren en países de ingresos bajos y medianos, las causas pueden ser sociales, culturales, biológicas, psicológicas y ambientales.
Según la OMS, en Colombia se estima que alrededor del 47% de la población sufre de depresión, lo que equivale más o menos a 24 millones de personas. Este trastorno mental es una de las enfermedades más frecuentes en el país.
“El Ministerio de Salud y Protección Social lanza el ‘Código Dorado’, una iniciativa que fortalece la capacidad de respuesta inmediata frente a situaciones de riesgo y consolida un compromiso colectivo por el cuidado de la salud mental en el país.”
Que sea el espacio para honrar la vida de aquellas que han atravesado la tentativa del mismo, que a pesar de dicho factor de riesgo hay quienes las rodeamos y esperamos salgan victoriosas de ese impase, que no queremos que sean valientes ni cobardes, que atiendan las recomendaciones en salud que se les ha brindado y se atrevan a transitar por el camino espiritual para que la fuerza superior las arrope con su luz para que entre todos prevengamos este flagelo.