Como tulueño y ucevista de corazón, me siento sumamente complacido, como todos mis coterráneos, que nuestro patrimonio cultural, la Uceva, haya ampliado su número de programas académicos a 26 y contando con más de 6.200 alumnos, además de tres maestrías y tres especializaciones.
Digo, que me siento orgulloso, porque retrocedí la memoria al gran momento de inicio de nuestra institución, de su devenir histórico en sus 53 años de servicio al país y vemos cómo se ha fortalecido académica y administrativamente.
La Uceva es el fruto de su afán colectivo, del optimismo de quienes a sus directivos le dieron confianza para guiarla. La inteligencia de un profesorado seguro de su capacidad. Un equipo administrativo que al lado del señor rector, Juan Carlos Urriago Fontal, han laborado sin descanso y una comunidad dispuesta a rodear con entusiasmo la grandiosa tarea que se ha venido ejecutando en nuestra Alma Mater.
La ciencia y la tecnología son dadas por la Universidad para que sean instrumentos y medios de cumplir la solidaridad y la justicia entre los asociados. Esta es la misión de la universidad, que se proyecta a la comunidad por medio de sus profesionales en un apostolado sin descanso. Lo mismo que en prácticas científicas.
El señor rector Juan Carlos Urriago Fontal, está sumamente complacido por los reconocimientos que ha recibido la Uceva, por parte de Colciencias. Ahora sus alumnos y docentes están llegando a los diferentes sectores de la ciudad, llevando talleres y encuentros con la población dentro de nuestro entorno social.
El objetivo directivo, es seguir abriendo espacios en la academia, la administración, la ciencia, las humanidades y la investigación. La Uceva, es presente y futuro.
