El barrio Jorge Eliécer Gaitán debe su nombre al caudillo inmolado el 9 de abril de 1948, pero de manera especial al fervor liberal que siempre acompañó a don Venancio Valencia, un reconocido dirigente tulueño que lideró diferentes proyectos urbanísticos en la Villa de Céspedes.
De acuerdo con los testimonios de los habitantes, el barrio como tal tuvo sus inicios en 1988 cuando un grupo de vecinos se unió al proyecto de vivienda que les propusieron, pero fue hasta 1994 cuando se inició con la construcción de las primeras viviendas.
Está ubicado en la parte occidental de Tuluá y en la actualidad es representado en su Junta de Acción Comunal por José Vargas, líder comunitario que junto a otro grupo de personas desde hace dos años trabaja por el desarrollo del sector.
¿Qué es lo mejor del barrio y qué le cambiaría?
Lo mejor del barrio Jorge Eliécer Gaitán es su gente. Acá somos echados para adelante, solidarios cuando nos toca y siempre hay voluntad de servicio a los demás. Es un barrio tranquilo, con una buena presencia policial.
Como todos los barrios hay algunos problemas con el tema del consumo de sustancias sicoactivas.
Me gustaría que cambiara la atención de la Administración Municipal hacia nosotros como comunidad y que nos cumplan los comopromisos que han hecho de manera reciente.
Aunque posee toda la infraestructura de servicios públicos domiciliarios, el barrio presenta algunas dificultades que guardan la esperanza de que sean atendidas por el gobierno municipal.
Sin campo deportivo
La primera de las problemáticas es la necesidad que se intervenga la cancha múltiple, la cual presenta un desgaste total en su pavimento, la malla se encuentra deteriorada y hace falta iluminación.
«Esa es una petición que le formulamos a la administración municipal durante un encuentro cumplido en 2024 y se la ratificamos a la directora de Planeación municipal, Alexandra Cardona, quien nos reunió hace unos días en el Bicentenario Plaza por lo cual esperamos que sea atendida, pues nuestro anhelo es contar con un escenario que incluso tenga cubierta que cumpla un fin multipropósito», precisó.
Falta pavimentos
A la par de esa necesidad los habitantes del Jorge Eliécer Gaitán están a la espera de que se ordenen los trabajos de pavimentación de la calle cuarta entre carreras 19 y 20, la única que les falta por ese elemento esencial para el desarrollo.
Sin sede comunal
Como sucede con la mayoría de estos organismos, el barrio en mención carece de un salón comunal, espacio con el cual contaban en los inicios pero que lo perdieron cuando de manera gentil lo cedieron a la escuela pública que terminó quedándose con el espacio.
«Hemos elevado una petición al alcalde Gustavo Vélez para que ahora, que la sede educativa queda desocupada por el traslado de los estudiantes, se nos entregue un espacio digno para reunirnos y debatir como comunidad que somos» comenta el señor Vargas tras añadir que por ahora es negativo.
Un parque bonito
Otro de los sueños de esta comunidad del occidente tulueño es tener un parque en buenas condiciones dotadas de un espacio con juegos biosaludables y esperan poder recuperar el lugar afectado por la presencia de varias carretillas abandonadas en el lugar.
