Los hechos
Todo sucedió el pasado martes 19 de julio, en horas de la noche, cuando en el citado lugar, ubicado en la carrera tercera con calle sexta, se encontraba laborando Deivis Gregory Méndez Subero, de 37 años de edad y fue sorprendido por un sujeto que le disparó en repetidas oportunidades.
Una vez perpetrada la acción sicarial, el homicida huyó del lugar con rumbo desconocido, dejando tras de sí la estela de sangre que acabó con la vida del empleado venezolano, quien murió en el lugar de los hechos como consecuencia de los impactos de bala que recibió.
Recrudecimiento
Este atentado se sumó a los hechos violentos que en las últimas semanas han sacudido a la zona norte del departamento.
Incluso, en este mismo municipio, el viernes anterior, en confusos hechos se registró la muerte de un joven de apenas 21 años de edad, en el corregimiento de San Pacho. Esa víctima era oriunda de Ansermanuevo.
Oportunidad
La víctima del hecho del martes anterior, desde hace algún tiempo se encontraba en esta región trabajando, después de haber estado privado de la libertad, según allegados.
Era venezolano, su familia principalmente se encuentra radicada en el vecino país, aunque una buena parte de sus conocidos se han trasladado hasta otros lugares de Colombia en búsqueda de oportunidades para salir adelante, como seguramente lo estaba haciendo, quien se había convertido en una persona creyente.