Jhon Alexánder Sierra Menjura, como fue identificada la víctima de los violentos, estaba próximo a llegar a su residencia ubicada en la vereda Alejandría Baja, distante a 30 minutos del corregimiento La Moralia, cuando fue abordado por sujetos desconocidos que le propinaron varios impactos de arma de fuego.
Según datos entregados por allegados, el hombre, que se desempeñaba en oficios varios, todos los días, antes de arribar a su casa, pasaba por la propiedad de una tía suya, a la que siempre saludaba y le pitaba desde la motocicleta en que se desplazaba. Y esa noche no fue la excepción, pues la mujer escuchó el habitual saludo de su ser querido y posteriormente fuertes detonaciones.
Acto seguido, la angustiada tía salió a observar lo ocurrido y se encontró con el cuerpo inerte de su sobrino, a un lado de la moto con el motor y las luces encendidas, en un paraje solitario donde, al parecer, lo esperaron sus homicidas.
Debido a que la zona en que se registró este hecho de sangre presenta problemas de orden público ante la presencia de grupos armados al margen de la ley, las diligencias de los actos urgentes y reconocimiento del cadáver de “El Negro”, como le decían cariñosamente familiares y amigos, fueron realizadas por personal de la Sijín de la Policía en la funeraria San Martín de Tuluá.