El fiscal del caso, Mario Burgos, durante la audiencia imputó a Nicolás Petro los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito. El funcionario hizo una exposición en detalle de cómo a partir de julio del 2022 hasta diciembre del mismo año, el hijo del presidente tuvo un incremento patrimonial injustificado por más de 1.000 millones de pesos.
La Fiscalía durante cinco meses realizó seguimiento minucioso de los movimientos de dinero de Nicolás Petro, luego de las denuncias que presentó su exesposa, Day Vásquez sobre el recibimiento de más de 1.600 millones de pesos de dos cuestionados políticos.
Nicolás Petro no aceptó los delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos imputados por la Fiscalía.
Para el ente acusador el contenido del celular de Day Vásquez, donde mantenía constantes conversaciones con Petro, es un elemento contundente para explicar lo que sería el injustificado incremento patrimonial porque no coincide con su único ingreso que tenía como diputado a la asamblea del Atlántico.
El fiscal habló de los dineros que habría entregado el hombre Marlboro y de Samuel Santander Lopesierra. También reveló las maniobras que habría utilizado Nicolás para ocultar el origen del dinero y adquirir dos ostentosas propiedades, incluso mencionó como terceros