De la celebración eucarística tomaron parte los sacerdotes de todas las parroquias de la jurisdicción y se desarrolló en la histórica catedral de San Pedro.
La Misa Crismal es la celebración en la que se consagra el Santo Crisma y bendice además los restantes óleos o aceites para la unción de los enfermos y los que se van a bautizar y la materia sacramental con la cual son ungidos los nuevos bautizados, son signados los que reciben la confirmación y son ordenados los obispos y sacerdotes, entre otras funciones.