Un recorrido realizado por las instalaciones permitió determinar que más del 70 por ciento de los locales adjudicados se encuentran sin uso y otros vendedores los utilizan como bodega, pues les sale más rentable salir con sus carretas a recorrer la ciudad o ubicarse en algunos andenes que quedarse en un lugar que por su diseño no les brinda garantía alguna.
DATO: Los vendedores aducen que el espacio que le entregaron no cumple con las mínimas condiciones.
¿Qué se debe hacer?
Consultado por EL TABLOIDE, el gerente de Infituluá, Denny Osorio Villada dijo que ese es un tema complejo, pues el municipio por un asunto legal no puede hacer ninguna intervención estructural y profunda a las instalaciones o de lo contrario podría incurrir en un detrimento patrimonial.
“Es claro que esa estructura que se pensó y diseñó con buena intención no tiene las condiciones para almacenar productos perecederos por la falta de ventilación de los cubículos, pero para poder entrar a ejecutar alguna mejora estructural debemos esperar que se cumplan cinco años”, explicó Osorio Villada.
Destacó que esas acciones se deben desarrollar con las personas que tienen el título de adjudicatarios, muchos de los cuales nunca han comparecido.
“Vamos a seguir trabajando de la mano con los comerciantes, especialmente los que insisten en la ocupación de los espacios públicos que son de todos los tulueños” puntualizó.