Así lo explicó Iván García, director de la Cámara de la Industria de Motocicletas de la ANDI, tras precisar que diferentes sectores buscan fortalecer el sistema de expedición de licencias, particularmente para las categorías A1 y A2, que corresponden a motocicletas y en tal sentido se propuso la creación de los Centros de Certificación de Aptitud en la Conducción conocidos como CALE, que verificarán la idoneidad de los conductores mediante pruebas teóricas y prácticas.
“Hemos solicitado la implementación de un organismo evaluador independiente como el CALE para hacer pruebas teóricas y prácticas y certificar la idoneidad de los conductores. Esta figura adicional complementaría el trabajo de los centros de enseñanza automovilísticos, asegurando que se cumpla con las competencias,” precisó. Este modelo ha demostrado ser exitoso en países como Estados Unidos, Canadá y varias naciones europeas.
En Colombia, la adopción de este sistema dependerá de la aprobación del Ministerio de Transporte, que ya está trabajando en las normativas necesarias para su implementación.
Explicó que los vehículos utilizados para la evaluación CALE estarán equipados con tecnología avanzada para registrar el desempeño de los aspirantes.
Estos mecanismos incluyen cámaras, sensores de contacto, GPS y otros sistemas que monitorean los movimientos, tiempos de reacción y comportamientos de los estudiantes. En el caso de los motociclistas, los sensores se ubicarán en el casco y las botas.
El nuevo trámite
Los aspirantes deberán registrarse en el Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT), completar un curso de formación y obtener la certificación correspondiente de aptitud física, mental y de coordinación motriz en un Centro de Enseñanza Automovilístico (CEA).
De forma posterior, al obtener la certificación, los aspirantes deberán inscribirse digitalmente en un CALE para presentar la prueba teórica, que consistirá en un formulario con 30 preguntas aleatorias sobre normas de tránsito y situaciones de conducción.
En el siguiente punto aplicar la prueba práctica que evaluará el manejo correcto del vehículo y la capacidad de desenvolverse en situaciones normales de tráfico. Las pruebas se realizarán en pistas cerradas para motocicletas y vehículos pequeños, y en la calle para el resto de las categorías.
Para el director de la Cámara de la Industria de Motocicletas de la ANDI, la implementación de este nuevo sistema significa que la licencia de conducción dejará de ser un derecho automático y se convertirá en un privilegio obtenido mediante un proceso más riguroso.
Se espera que en los próximos días el Ministerio de Transporte expida el documento regulando la medida para que entre en vigencia.