“Esta gestión la realizamos a través de la CVC y la Fundación Universidad del Valle, quienes nos han ayudado a cumplirle al campo andaluz.
Es un sistema que se construye debajo de la superficie, en viviendas que no cuentan con alcantarillado público, allí se reciben y separan las aguas residuales domésticas, mediante la transformación físico-química de la materia orgánica contenida en dichas aguas, para facilitar su correcta degradación y reducir el efecto contaminante”, precisó la alcaldesa Ellicel Arcila Posso.