Como parte de la visita, los pequeños en un gesto de generosidades hicieron un donativo de huevos con la finalidad de contribuir a su alimentación diaria. «Durante la jornada vivimos un espacio cargado de aprendizaje y valores: compartimos historias de vida, intercambiamos anécdotas y realizamos un recorrido por las instalaciones, donde los niños conocieron de cerca la cotidianidad de nuestros adultos mayores, comprendiendo la importancia de valorar, respetar y acompañar esta etapa de la vida» indicaron los voceros de la institución.
Para los pequeños fue un momento que representó conocer de cerca a quienes en el pasado trabajaron para que Caicedonia creciera en todos los sentidos y forjando los valores que hoy ellos representan con la obligación de conservarlos y de manera posterior transmitirlos a las generaciones de nuevos caicedonitas.