Nada es tan importante en la vida de un pueblo como el encontrarse en las diversas facetas de su discurrir con el impresionante testimonio de la realidad. En la lógica comparación de los vaticinios y las promesas, con advertencias y los racionamientos de quienes tuvieron ka capacidad provisora de calcular las urgencias que siempre sobrevivieron.
Colombia es un país que está viviendo y sufriendo su paso al desarrollo el cual no admite una ´política económica improvisada y requiere una acumulación de reservas, puesto que no es improbable que se pueda esperar prosperidad cuando decrece la producción y se agotan los recursos monetarios que cautelosamente se acrecentaron en tiempos anteriores.
Porque para el desarrollo de un pueblo como el nuestro es imprescindible un fuerte estímulo a la producción, con crédito barato, que dé ocasión a la gente de trabajo, de iniciativa y de empresa, para obtener la utilidad suficiente con la cual pueda no solo devolver la utilidad suficiente, con la cual pueda no solo su obligación sin alcanzar el rendimiento que haga posible fortalecer su medio de producción.
Nosotros estamos respaldando a plenitud todos los esfuerzos que haga el nuevo gobierno para llegar a protocolizar el entendimiento con la fuerza guerrillera del E.L.N, y las llamadas bandas criminales, cuyo sistema por la vía de controlar el timón del gobierno.
Pero esos canales deben de estar acompañados del cumplimiento de los puntos que aceptó estudiar y discutir y las propuesta sociales que expuso por todo el territorio nacional, como la vivienda digna buenos sistemas de salud el fortalecimiento empresarial para abrir fuetes de trabajo, sin olvidar el sistema pecuario, porque no es justo que tengamos que importar carne l nuevo gobierno creemos con certeza, que tendrá como meta el abastecimiento del campo con tierra laborables para el campesino y facilidad para el cultivo, la producción y el comercio de sus productos y una revisión a los Tratados de Libre Comercio que lesionaron enormemente a industriales menores.
La pequeña industria agoniza, pero en este panorama inquietante nos damos cuenta del valor de los colombianos, demostrado el pasado 19 de junio de 2022.