La pandemia del Covid-19 ha segado la vida de miles de personas en todo el mundo, ocasionando con ello sufrimiento y dolor. Estos efectos se podrían intensificar, puesto que en un artículo de internet se lee: “Para algunos profesionales de Salud Pública y Epidemiología de la Universidad CES, el cuarto pico de contagio podría darse en noviembre del 2021, de acuerdo con el análisis de modelos de tendencia cuadrática, epidemiológicos básicos o comportamentales del contagio, a los que se recurrió”. Si bien esta afirmación se refiere a Colombia, también es aplicable a continentes como Europa; incluso en otros territorios como, Estados Unidos se está hablando de un quinto pico, debido a la temporada invernal que se avecina y a la falta de voluntad de algunos ciudadanos para hacerse aplicar el biológico. Esta negligencia, según las autoridades competentes, hace tránsito en el mundo entero. El Doctor Anthony Fauci, Director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de los Estados Unidos (NIAID por sus siglas en inglés), en entrevista reciente, sostiene que es importante que los grupos elegibles para la aplicación del fármaco lo reciban sin reserva alguna. En su versión, “contamos con una vacuna con un grado de eficacia del 94% al 95%, y prácticamente del 100% de eficacia contra la forma severa de la enfermedad, esto es, hospitalización y muerte”. La vacuna de igual modo, agrega, es importante para la sociedad en general, “porque cuantas más personas se vacunen, más cerca estaremos de lo que se conoce como inmunidad colectiva”. En consecuencia, considero que la asistencia a los centros de vacunación ha de ser masiva y los individuos renuentes a la inmunización, han de liberarse de prejuicios, preconceptos y demás creencias que les impiden acceder a este proceso. Afortunadamente, en nuestro país, ya se están dando pasos importantes para minimizar el contagio, como la presentación del carné de vacunación para ingresar a sitios que implican aglomeración, como estadios, restaurantes, bares, cines, etc. Se espera que políticas como éstas nos ayuden a contrarrestar los efectos del virus para en un futuro cercano volver a la normalidad. Por supuesto, el proceso en mención ha de estar acompañado de las normas de bioseguridad que se han venido implementando en estos momentos aciagos.