El gobierno dice que son las farmacéuticas las responsables de la no entrega de medicamentos y de la difícil situación que pareciera agravarse cada día más.
Por su parte, los representantes de estas entidades se quejan por la falta de pagos de la Adres y, al mismo tiempo, la oposición sostiene que el Jefe de Estado falta a la verdad cuando denuncia acaparamiento de medicamentos en algunas bodegas que son administradas por las farmacéuticas.
Mientras tanto, quien realmente soporta los impases, la negligencia, la falta de gestión, son los millones de usuarios, principalmente de la Nueva EPS, que se someten a largas y extensas filas para tratar de obtener un medicamento.
En el caso de Tuluá la situación es más compleja aún, porque solo hasta el 15 de abril se estaría iniciando la entrega de estos productos a los afiliados a Nueva EPS, que en la ciudad serían del orden de los 70 mil, aproximadamente, por lo que se hace necesario la implementación de dos lugares para tal fin, para poder entregar y dar abasto a esa gran cantidad de pacientes que requieren su medicamento.
Dice el Secretario de Salud, que por eso la demora. Se está adecuando el sitio, eso sí, responsabilidad total de la empresa prestadora de ese servicio, en este caso, Disfarma, quien en Tuluá cuenta con un pequeño local que está ubicado en la carrera 32A y que no reúne las condiciones para esa entrega a esa gran cantidad de afiliados.
Por lo pronto, el servicio, en general, cada vez es más caótico, donde les entregan medicamentos a los usuarios de Nueva EPS, como en Buga, deben empezar a hacer fila desde la noche anterior con el fin de obtener una ficha para alcanzar turno y poder reclamar la medicina que tanto necesitan y por la que tanto han esperado.
Pero lo peor tiene que ver con la demora ocasionada por ese sistema y cuando muchos pacientes llegan a reclamar, por fin, el medicamento, les dicen que las órdenes caducaron y que deben volver a la respectiva autorización, ¿entonces?, como siempre, el paganini es el de a pie, el ciudadano común y corriente.