Tomar decisiones es más difícil cuando no depende solo de uno mismo… Es un municipio, un departamento entero; entidades territoriales con necesidades que solo los propios habitantes dimensionan.
Tras una semana de la jornada electoral del pasado 29 de octubre, hay alegrías y decepciones; pero la verdad se ha dicho y el pueblo ha hablado a través de la democracia.
Aunque la verdad, así como se pueden poner sobre la mesa mil cosas, no queda mucho que decir, en sí, felicitar a la ciudadanía tulueña por salir a votar, independientemente de a quienes apoyó durante estos meses y a quienes marcó en las urnas, lo importante es que cumplió con su deber ciudadano, haciendo valer su derecho de elegir, felicidades a todas las personas que salieron con la autonomía de su voluntad a votar por un grupo de ciudadanos que traerán orden al territorio, felicidades por elegir en razón del bienestar común y no por un favor, una remuneración o una promesa exorbitante.
A los nuevos gobernantes que se posesionarán en unos meses, solo queda desearles éxitos y recomendarles la calidad de vida de los ciudadanos que quedamos a merced de su actuar respecto de nuestra integridad, aunque recuerden, a quienes estrecharon la mano y a quienes miraron a los ojos en campaña, a quienes prometieron una transformación, no nos olviden, porque todos estamos alerta de cada paso y ustedes también son ciudadanos, son parte de todo.
A los jóvenes liderazgos que ahora hacen parte de las corporaciones públicas… La innovación debe ir de la mano de la experiencia, pues esta no se improvisa; sin embargo, no pierdan la esencia que nos caracteriza como jóvenes, la conciencia, la profundidad y la sensibilidad del pensamiento, permitamos una guía que no nuble el autogobierno y dejen en alto la voz vanguardista de nuestra generación, sin olvidar a los pilares que nos trajeron hasta aquí. Nuevos gobernantes, somos la misma ciudadanía… bienvenidos.