Yo no sé si las cuchas del mural tienen la razón o no pero lo que sí creo es que esa actividad promovida por un grupo de artistas, quizás muchos de ellos afines con el gobierno del presidente Petro, ha lanzado, no solo un mensaje a reflexionar sobre muchos acontecimientos del país sino también a explorar los caminos de la tolerancia donde el pensar diferente sea una opción de avanzar como sociedad.
Esa tolerancia obviamente debe darse en todos los sentidos y máxime por estos días cuando la contienda política en pos de escoger al nuevo inquilino de la Casa de Nariño se empieza a calentar y por ende los ánimos se caldean y empiezan a aparecer todo tipo de argumentos que, tristemente en las primeras de cambio, demuestran que estamos caminando por el mismo lodazal de siempre y dirigiéndonos al abismo que nos amenaza hace ya décadas.
A juzgar por lo que se dice de un lado y de otro es casi que imposible pensar en que el país se va a encaminar por una ruta donde el entendimiento sea la base y muy por el contrario observo con preocupación a una sociedad polarizada al extremo, donde unos se sienten con el derecho de borrar lo que otros han pintado simplemente porque no se comulga con esa idea o ideología.
Es mucho más complejo el panorama si los encargados de dirigir la orquesta mueven su batuta como endemoniados llevando a sus músicos a tocar frenéticos ritmos sin sentido, entiéndase la metáfora a que los líderes llamados a tener la cabeza fría la tienen más caliente que los climas de estos días en el paradisíaco Valle del Cauca.
Qué bueno sería pensar en que un día logremos la madurez política para enfrentarnos con ideas y no centrarnos en persecuciones insulsas o creyéndonos los salvadores del mundo y decidiéramos caminar por la misma senda respetando las diferencias y entendiendo que ellas son la base de nuestra democracia.
Una recomendación final desde esta humilde tribuna sería de una vez por todas desarmar las palabras, bajar la gobernanza de las redes sociales, pues en ella se piensa y escribe rápido y tristemente lo que se escribe jamás se borra así se elimine el mensaje al instante.