El Valle del Cauca se caracteriza por tener muchas zonas turísticas disponibles para las personas que deseen salir de la rutina normal de sus vidas, ya sea para los fines de semana o las temporadas de vacaciones. Uno de estos lugares de la región, que bien vale la pena visitar, es la zona de alta montaña de Trujillo.
Quienes decidan ir podrán disfrutar de una vista espectacular, desde donde se puede ver una pequeña parte de la gran planicie vallecaucana, dependiendo desde qué lado de la montaña se observe. Por ejemplo, si se tiene a la mano unos binoculares de buena capacidad se podría ver a decenas de kilómetros la infraestructura y tierras de varios municipios vecinos como Andalucía, Bugalagrande y más allá.
Si no se tiene la posibilidad de los binoculares, de cualquier modo, el escenario es hermoso, relajante e ideal para inspirar a los novelistas y poetas de nuestro país o del exterior.
Sin embargo, una zona de tanto potencial turístico necesita de la observancia y de la comedida ayuda de la gobernación para rescatar tramos de la vía que presentan deterioro.
Hay un largo tramo al que se le está haciendo mantenimiento de Trujillo para arriba actualmente, por lo que los viajeros deben tener paciencia a la espera de que les den vía, no obstante, hay una corto tramo que está después del puente de Cuancua, antes de llegar al municipio, que necesita reparación inmediata ya que la banca se está viniendo abajo y de no atenderse pronto, en cualquier momento los lugareños podrían quedar incomunicados o un vehículo de gran peso podría terminar rodando montaña abajo.
Aún hay tiempo de evitar que ello pase, pero se debe actuar con diligencia.