“Se trata de un aumento significativo con respecto al año pasado”, prosiguió, añadiendo que Telegram ya había tenido oleadas repentinas de inscripciones durante sus “siete años de experiencia en protección de la vida privada de sus usuarios”, pero, “esta vez es diferente”.
“La gente ya no intercambia su privacidad por servicios gratuitos. Ya no quiere ser tomada como rehén de los monopolios tecnológicos“, añadió el multimillonario, de 36 años.
WhatsApp, Telegram y Signal
Sin mencionar a su competencia, hace referencia a WhatsApp, bajo el fuego de las críticas desde el jueves pasado tras haber solicitado a sus dos mil millones de suscriptores aceptar nuevas condiciones de utilización.
Aquellos usuarios que las rechacen no podrán acceder a sus cuentas a partir del 8 de febrero. El grupo busca de esta manera rentabilizar su plataforma permitiendo a los anunciantes contactar a sus clientes a través de WhatsApp, e inclusive vender sus productos de manera directa, como ya ocurre en India.
Este anuncio también tuvo consecuencias para otra aplicación de mensajería, Signal, que desde la semana pasada está en la lista de las más descargadas en las plataformas Apple Store y Google Play de varios países.
Fundada en 2013 por los hermanos Pável y Nikolái Dúrov, creadores antes de la popular red social rusa VKontakte, Telegram afirma que la seguridad es su prioridad y generalmente rechaza colaborar con las autoridades, lo que le ha supuesto intentos de bloqueos en algunos países, sobre todo en Rusia.
Con AFP.