Para la obra, elaborada por el artista plástico Harold Recio Echeverry en su taller Cuántico, ubicado en el sector Casas Huertas de la Villa de Céspedes, se utilizaron más de 3 mil piezas, entre las que se encuentran bielas, cadenas, balineras, sillines, frenos, pedales, llantas, radios, piñones, ejes, entre otros tantos elementos.
De acuerdo con lo establecido, la escultura, desarrollada por encargo de la Alcaldía Municipal de Tuluá, duró en proceso cerca de cuatro meses, tiempo durante el cual el artista se dedicó, junto a su equipo de colaboradores, a pegar, soldar, dar forma y pintar.
Vale la pena recordar que Luis H. Díaz, nacido en Buga pero tulueño de corazón, fue múltiple campeón en pruebas de pista, participó en 18 Vueltas a Colombia y en diferentes competencias internacionales, a las que llevó con altura el amarillo, azul y rojo de la bandera colombiana, la que precisamente hoy le acompaña en la obra de arte.