El nombre de Brayan Campo volvió a generar conmoción en el país. El hombre condenado a 58 años de cárcel por el asesinato de Sofía Delgado, la niña de 12 años que desapareció en Candelaria, Valle del Cauca, habría confesado desde prisión que no fue su única víctima y que en el pasado habría cometido otros crímenes contra menores de edad.
La revelación fue hecha por Luis Gregorio Ramírez Maestre, alias la Soga, quien cumple condena en la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa, en Valledupar. En diálogo con el pódcast Más Allá del Silencio, aseguró que el propio Campo le narró, junto con otros reclusos, detalles de cómo cometió el crimen de Sofía y de otras supuestas víctimas.
Según Ramírez Maestre, la conversación ocurrió en junio de este año, mientras compartían con otros presos, entre ellos Jhonier Leal, condenado por el homicidio de su madre y su hermano.
“Nos contó cómo había sido la muerte de la niña y sinceramente eso molesta porque uno también tiene hijos pequeños. Después dijo que ella no era la única, que había matado a más niñas”, relató alias la Soga.
En medio de la charla, Campo habría mencionado incluso el nombre de una de las supuestas víctimas: Érika Sepúlveda, una adolescente de 16 años.
El testimonio es estremecedor. De acuerdo con alias la Soga, Brayan Campo confesó que cometía estos crímenes por placer y que nunca sentía atracción por mujeres adultas.
“Dijo que las mujeres mayores le generaban rabia y que se desquitaba con los niños”, aseguró.
El recluso añadió que Campo manifestó no haber revelado estos hechos a las autoridades porque “nadie le propone un trato”, por lo que, en sus palabras, “no vale la pena decir la verdad”.
Alias la Soga sostuvo que Campo reconoció tener “muchos casos” en el Valle del Cauca y que incluso algunas personas inocentes habrían sido condenadas por crímenes que en realidad él cometió.
“Le dije que pensara en confesar todo, porque las familias de esas víctimas merecen saber la verdad. Son muchos casos que no se saben y él mismo asegura que fue el responsable”, añadió.
De acuerdo con el relato, el asesino de Sofía Delgado fue enfático en que sus víctimas siempre eran niños y adolescentes, y que nunca atentó contra hombres ni mujeres mayores de edad.
Aunque estas declaraciones se conocieron a través de un recluso y aún no han sido verificadas por las autoridades judiciales, el testimonio abre la puerta a nuevas investigaciones en torno a Campo, quien actualmente purga su condena en La Tramacúa.
El caso de Sofía Delgado ya había causado profunda indignación en el país. Ahora, con estas posibles confesiones, se reavivan las dudas sobre si Campo habría estado detrás de otros crímenes que permanecen en la impunidad.