En la actualidad, el celular se ha convertido en una extensión de nuestra identidad. Allí almacenamos desde fotos y conversaciones privadas hasta accesos a nuestras cuentas bancarias, correos electrónicos y redes sociales. Sin embargo, esta comodidad también implica un alto riesgo: si el dispositivo cae en manos equivocadas o es vulnerado por un ciberataque, las consecuencias pueden ser devastadoras.
De acuerdo con un informe reciente de Kaspersky, solo en 2024 se registraron más de 33 millones de ataques contra teléfonos móviles en todo el mundo, cifra que evidencia el creciente interés de los ciberdelincuentes por este tipo de dispositivos. Las amenazas no siempre provienen de sofisticadas técnicas de hackeo. En muchos casos, basta con descargar una aplicación maliciosa o hacer clic en un enlace engañoso para comprometer los datos personales.
Las señales de que su celular puede estar comprometido
Aunque muchos usuarios no se dan cuenta de inmediato, hay signos claros que podrían alertarlo de que su celular está siendo espiado o controlado por terceros:
- Ruidos o interferencias durante llamadas, como pitidos o voces extrañas, pueden indicar que sus conversaciones están siendo grabadas.
- Aumento inesperado en el consumo de datos móviles, causado por aplicaciones espía que envían información a servidores externos.
- Comportamiento anómalo del dispositivo, como bloqueos frecuentes, batería que se agota rápidamente, o encendido y apagado sin razón aparente.
Consejos clave para evitar ser víctima
Los expertos en ciberseguridad coinciden en que el primer filtro es el sentido común. Aquí algunas recomendaciones prácticas para proteger su dispositivo móvil:
- Descargue aplicaciones solo desde tiendas oficiales (App Store o Google Play).
- Desconfíe de correos, mensajes o enlaces sospechosos, incluso si parecen provenir de fuentes conocidas.
- No se conecte a redes Wi-Fi públicas sin usar una VPN, que encripta su conexión y evita interceptaciones.
- Revise los permisos de sus aplicaciones y limite el acceso innecesario a cámara, micrófono, contactos y ubicación.
- Active la autenticación en dos pasos (2FA) para servicios críticos como correo, banca y redes sociales.
- Mantenga actualizado el sistema operativo y las apps, ya que muchas actualizaciones corrigen vulnerabilidades de seguridad.
- Evite almacenar contraseñas en navegadores y use un administrador seguro.
- Instale un antivirus confiable, especialmente en dispositivos Android.
Principales amenazas a tener en cuenta
Entre las tácticas más comunes utilizadas por los ciberdelincuentes están:
- Phishing y vishing: técnicas que simulan ser comunicaciones de bancos o entidades oficiales para robar información.
- Malware y apps falsas: programas que permiten el acceso remoto al contenido del teléfono.
- SIM swapping: modalidad que consiste en duplicar su tarjeta SIM y tomar control de sus cuentas, evadiendo incluso la verificación en dos pasos.
- Redes Wi-Fi abiertas: al conectarse sin protección, cualquier tercero podría interceptar su información.
En tiempos donde la privacidad digital es frágil, la prevención sigue siendo la mejor defensa. Con un par de ajustes en su configuración y mayor atención a su comportamiento en línea, es posible reducir significativamente el riesgo de ser víctima de espionaje o robo de identidad.