Según el reporte entregado por las autoridades, la víctima, identificada como Wilinton Gómez Peláez, fue baleado por desconocidos en el sector conocido como Volcanes.
La acción violenta, que se suma a los homicidios que en los últimos días se han registrado en distintos sectores, ocurrió el miércoles 18 de mayo en horas de la tarde, pero solo hasta el jueves las autoridades judiciales se desplazaron hasta el sitio donde ocurrió este homicidio para adelantar los respectivos actos urgentes.
Hasta el momento se desconocen los móviles de este nuevo crimen.
De la víctima se pudo establecer que había nacido en el municipio de La Virginia en el departamento de Risaralda el 11 de mayo de 1978.
Triste situación
De otra parte, esta semana se registró una situación triste y dolorosa con el homicidio de un sujeto de quien se desconoce su identidad. El hombre, fue muerto a balazos por individuos armados, la tarde del sábado 14 de mayo, a un lado de la vía en jurisdicción del corregimiento de Jicaramata, zona montañosa de Tuluá.
El cadáver de la víctima permaneció allí, en el sitio donde le dispararon hasta que en horas de la tarde del miércoles 18 de mayo, cuando el cuerpo estaba ya en avanzado estado de descomposición y, en vista de que ninguna autoridad hizo presencia en esa zona, algunas personas decidieron darle sepultura, pues el olor era insoportable.
«De esa persona nadie conocía su identidad, pues no residía en el sector y, al parecer, tampoco tenía familiares allá», sostuvo un habitante de la región que prefirió omitir su nombre.
Esa situación se presentó debido a que las autoridades que realizan los actos urgentes y la inspección técnica de los cadáveres de quienes son asesinados, no se desplazan hasta la zona montañosa por problemas de seguridad, teniendo en cuenta que en esa zona opera la compañía Adán Izquierdo.
Precisamente, el personero delegado para los Derechos Humanos en el municipio de Tuluá, José Martín Hincapié Álvarez, dijo que es lamentable que sucedan hechos como ese.
El funcionario, además de condenar la acción violenta, expresó que es lamentable que sea la propia comunidad la que deba proceder y tomar esa iniciativa. “El mensaje que como institucionalidad estamos dando a la comunidad indirectamente es de incertidumbre», enfatizó.