Karol Martínez Silva, alcaldesa de Buga, debería de apersonarse de la difícil situación que viven los moradores del sur de la ciudad con los árboles que están «reclamando» poda o erradicación antes que caigan sobre los peatones o conductores que se movilizan por el lugar. Aunque no es su función directa, debe ordenar a la dependencia encargada del caso…¿O será que debe citar a sus funcionarios a un Consejo de Gobierno televisado para que los bugueños se enteren quién está trabajando o «mamando gallo»?
Otra queja de los bugueños. Ya es tiempo que la oficina del espacio público empiece a trabajar en el ordenamiento de las actividades que se desarrollan en el parque Cabal que, cada día que pasa, se deteriora y su imagen da lástima, y eso que es la cara de la ciudad del Milagroso y por donde pasa la mayoría de los turistas que llegan a la Basílica. Ya es hora de ponerle coto a estas continuas quejas…¡No molesten más a Karitol!
Preguntas pendejas ¿Será que el gobierno central estará enterado que los funcionarios de tránsito y movilidad de Tuluá, celebran los cumpleaños de sus compañeros en horas de atención al público, como ocurrió el pasado miércoles en horas de la mañana, cuando los usuarios tuvieron que esperar a que terminaran los festejos para que los atendieran?
El parque Cabal de Buga sigue recibiendo críticas de propios y extraños por su suciedad y la invasión de vendedores de toda especie.
¿Qué pasó con la Casa Campesina que funcionaba en Tuluá, donde los habitantes de la zona montañosa que tenían cita médica o exámenes clínicos podían pernoctar?
¿Usted está de acuerdo en que los alcaldes realicen sus consejos de gobierno en directo por las redes sociales?
En los hogares colombianos han notado que cada día que pasa, las panaderías reducen el tamaño de sus productos, pero el precio de los mismos sigue en ascenso. Se entiende que todo ha subido, pero no es para tanto. Ahora las familias están buscando alternativas para que el primer alimento de la mañana les salga más económico porque el dinero cada vez alcanza menos…¡Añañaiii!
Los llamados «piques» de los motociclistas siguen atormentando a los vecinos de los barrios Príncipe, Maracaibo y el Jardín los días jueves en la noche
Los controles policiales dirigidos a los motociclistas en Tuluá parecen ser insuficientes o simplemente ineficaces, ya que las peligrosas competencias callejeras, conocidas como «piques», continúan cada jueves y viernes, en sectores como Príncipe, Maracaibo y La Graciela, donde las calles se convierten en pistas de carreras ilegales, molestia constante para los vecinos, quienes deben soportar el ruido ensordecedor de los motores y mucho más cuando hay enfermos o personas que tienen que madrugar…¡Añañaiii!
Varias damas que, ocasionalmente, se movilizan por los andenes de la carrera 23 con la calle Sarmiento, se quejan de los vendedores de la zona por la zalamería y grosería al colocarles apodos y decirles malas palabras. Esta situación se mejora un poco cuando aparecen los policías o los gestores de convivencia…¿Estarán de acuerdo los patrones con esta actitud de sus empleados?
Más allá de ser un simple acto de rebeldía juvenil, estos piques representan un grave peligro no solo para quienes los practican, sino también para los peatones y otros conductores que transitan por la zona. En Tuluá, el control a estas prácticas ilegales parece no tener un resultado que dure en el tiempo…¡No hay que bajar la guardia!
Padres de familia, que tienen a sus hijos en las instituciones educativas y escuelas de la Villa de Céspedes, están muy inconformes porque el aseo de las instituciones educativas tienen que hacerlo los estudiantes o los profesores, toda vez que la empresa que está a cargo de estos oficios no ha firmado el respectivo contrato…¡Plof!
Mientras la inseguridad reina en toda la Villa de Céspedes tenemos estacionado, en la edificación del aeropuerto Heriberto Gil Martínez- Farfán, a un pelotón de soldados durmiendo y aumentando barriga. El sitio está enmontado a su alrededor; como terapia y con machete en mano sería oportuno que hicieran la limpieza para mejorar el entorno …¡Son una muestra de desorden!
Personas que se movilizan permanentemente por la calle Sarmiento con carrera 23 se quejan de la vulgaridad y el abuso de los apodos que utilizan los vendedores
Esta semana se conoció que el servicio de gas natural subiría de precio hasta el 36% en algunos departamentos de Colombia, pero para nuestra fortuna, el Valle del Cauca no estaría entre los castigados con este aumento. Ahora hay que hacer fuerza que esta decisión no se cambie con el pasar de los meses ante la escasez del gas natural en nuestro país…¡Para estar pendientes!.
Los carretilleros locales, cuyo censo ha aumentado en forma considerable con la llegada desde Buga de los que no lograron el cupo para obtener vehículo motorizado, siguen esperando alguna razón positiva o negativa de cómo va el cambio del transporte de tracción animal por el de motor aquí en la Villa de Céspedes…¿O se cancelaría esta opción?
Sorprendió la renuncia del concejal Gilmer Rangel, del partido liberal, a su curul en el Concejo de Sevilla. Como se recordará, Rangel ocupó el segundo lugar en la votación para la Alcaldía con más de 8 mil votos. Rangel, comentó que con el sueldo de concejal no le alcanzaba para sus gastos personales y familiares, además como está en la oposición, nada de nada…¿Sería buena la idea?
El programa del Canal Caracol «Yo me llamo» sigue batiendo récord de sintonía en la televisión, donde Amparo Grisales, uno de los jueces, sigue acaparando la atención de los televidentes…..¡Para llegar temprano a casa!