De acuerdo con los datos históricos, el nombre de este barrio es el resultado de la abreviatura de la Asociación Agrícola Interveredal, una organización de base campesina que nació en la vereda La Cristalina, zona rural de Bugalagrande.
En 1984, Ángel María Muñoz, presidente de la Asociación se trasladó a Tuluá y convocó a los tulueños que quisieran tener casa propia para que se unieran a su organización comprando un lote por 45 mil pesos.
Tres años después y ante la constante negativa de la alcaldía de autorizar la construcción de sus viviendas, un grupo de personas ocuparon el terreno y ahí empezó la historia.
Servicios públicos
Por instrucciones del señor Muñoz los primeros habitantes construyeron sus viviendas en bahareque y dejando la parte frontal libre y construyeron letrinas para el manejo de las aguas residuales. Años después y ante una pegada masiva de las redes eléctricas, la CETSA llevó el fluido eléctrico y con recursos del Plan de Padrinos en la alcaldía de Gustavo Álvarez Gardeazábal dotó el barrio de alcantarillado y luego el servicio de acueducto.
El presente
En la actualidad, la Junta de Acción Comunal es presidida por Néstor James Vanegas Narváez, un joven líder que ha pasado su vida en el barrio y que hace una década lidera el organismo comunitario.
“Ha sido un ejercicio difícil porque es una comunidad con muchas necesidades y hoy no contamos con el apoyo efectivo del Estado y lo que hacemos es con las uñas”, comenta Vanegas.
Cancha acabada
El único espacio que tiene el barrio Asoagrín para su esparcimiento es la cancha múltiple que no ha escapado a las acciones vandálicas, sufriendo daños en los tableros de baloncesto, la malla perimetral y los juegos infantiles como columpios, burros, también fueron dañados.
“Ya presentamos el proyecto para remodelarlo y queremos contar en ese espacio del polideportivo con un salón múltiple para nuestras actividades”, dijo Vanegas a EL TABLOIDE.
El parque del juego
Uno de los sitios más representativos del barrio es el parque que se convirtió en el punto de encuentro para los juegos de mesa, aprovechando la sombra de los árboles.
Para este otro lugar de esparcimiento, la junta de acción comunal también solicitó ser intervenido en el plan de desarrollo comunal con la poda de los árboles, reparación de andenes internos y externos y pintura.
Faltan pavimentos
En la actualidad la comunidad de Asoagrín Farfán espera la pavimentación de la calle 27 frente al vivero El Rosal y la continuidad de la 26C8 en el entorno del parque principal.
Apoyo social
Junto a las obras físicas, la comunidad del barrio Asoagrín Farfán espera que lleguen al sector los programas sociales de la alcaldía local.
James Vanegas N. Presidente J.A.C Asoagrín
¿Qué es lo mejor del barrio?
Sin duda alguna la gente. Es muy solidaria cuando se los convoca, hay una buena convivencia entre vecinos y por estos días hay un clima de tranquilidad muy chévere.
¿Qué no le gusta?
Muy pocas no me gustan, pero podría ser la falta de sentido de pertenencia para no cuidar algunos bienes, como los juegos infantiles que con esfuerzo instalamos para los niños.
¿Un sueño o proyecto?
Que nos remodelen el polideportivo y nos construyan el salón múltiple que lo requerimos para nuestra labor comunitaria.
¿La seguridad?
Ha mejorado mucho, aunque falta un poco más de patrullaje por parte de la policía y mayores posibilidades para los jóvenes del sector.