El pasado 11 de octubre se cumplieron 531 años de haber llegado Cristóbal Colón y Mayorca al nuevo continente por él descubierto.
No deja de ser un acontecimiento decisivo para la historia mundial, la llegada de tres carabelas españolas al mando del genovés Cristóbal Colón.
Dice la historia que Rodrigo de Triana, marinero que iba en La Pinta, anunció la vista de tierra a lo lejos, después de dos meses de incierta navegación. Colón desembarca en la isla que los naturales llamaban Guanahani y la bautizó como San Salvador. Actualmente hace parte de las Bahamas.
Una lectura de este suceso podría ser el suple rememoración, pero no podemos desconocer que a este paso colonizador se debe en gran parte en que somos hoy los pueblos americanos. El mundo cambió y comenzó una nueva etapa de cruenta colonización, unida a fenómenos de violencia cultural, la cual todos los modelos de existencia de las culturas aborígenes fueron transgredidos por los colonizadores. La América hispánica fue saqueada, violada, sometida y aparte de este comienzo trágico de la segunda parte de la historia del continente americano es que se empiezan a construir los cimientos de la civilización hispanoamericana actual.
El descubrimiento de América, muestra unos valientes conquistadores que vinieron a traer cultura, religión y progreso a los pueblos nativos de este joven continente. La historia no cuenta la barbarie, la destrucción de pueblos enteros y el sometimiento de los sobrevivientes a una forma terrible de violencia. Obligados a perder su identidad, su idioma, su fe, sus ritos. De esta manera la subyugación fue total. Es necesario decir que esta no fue una decisión tardía, en el diario de Colón, dos días después del desembarco, ya hace alusión a la posibilidad de esclavizar a la tribu de los Zainos, la primera en ser conquistada.
Del Diario de Colón.- (Algunas palabras con castellano y ortografía antiguo)
Domingo 14 de octubre: “puedenlos todos llevar a Castilla, o tenellos en la misma isla captivos, porque con cincuenta hombres los ternán a todos sojuzgados y los haran hazer lo que quisieren” Esta expresión de crueldad de Colón, a quien la historia le llena de honor y de méritos, sería el preámbulo de lo que fuera más tarde la destrucción paulatina y sistemática de las tribus americanas a quienes todavía les siguen arrebatando sus tierras.