Para nadie es un secreto que la muerte de un ser querido deja un profundo vacío en sus familiares y amigos; y aunque para algunos, es un momento de descanso porque su familiar estaba en situaciones de salud muy lamentables y ya esperaban el momento final, no deja ser difícil afrontar este momento.
Es por eso que a nivel nacional, funerarias que se encargan de prestar los servicios exequiales y dar el último adiós a nuestros familiares y amigos difuntos, han implementado estrategias para ayudar a los familiares de los difuntos a afrontar el momento del duelo.
Un ejemplo de esto es la funeraria San Vicente de Medellín, la cual desde hace 20 años viene trabajando en estrategias de acompañamiento personal y grupal en los campos espiritual, psicológico, pedagógico e incluso en actividades de tipo artístico y cultural que permiten a sus afiliados llevar el proceso de duelo de la mejor manera posible.
El motivo de la muerte puede ser diverso: enfermedades, accidentes o incluso acontecimientos violentos, que hacen que el proceso de la muerte cause depresión, ansiedad y en algunas ocasiones se somatizan causando graves situaciones para los dolientes y que exige un cuidado especial en aras de ayudar a los dolientes a vivir este momento de la mejor manera posible.
Gracias a Dios y al empuje de la funeraria San Martín, en nuestro municipio se viene implementando un servicio en el cual la funeraria le ofrece a los dolientes un espacio de oración en el momento de la muerte y de acompañamiento a través de terapias psicológicas que permiten el manejo de duelo.
Se quiere, en adelante permitir espacios de trabajo a nivel personal y grupal y con celebraciones rituales que permitan a los dolientes hacer un proceso de duelo, maduro, responsable y saludable mejorando así la salud mental de los familiares que han perdido un ser querido.