Por estos días me llegó en el Facebook un mensaje en torno al cual se afirma que la Nasa está feliz porque con uno de sus nuevos inventos pudo llegar a Marte, si no estoy mal una de las líderes de ese programa espacial es una colombiana. Sin embargo, esa “hazaña” le costó a la NASA la media bobadita de 2500 millones de dólares que equivalen a precio de dólar de $4400 a la no despreciable suma de 11 billones de pesos colombianos.
Ahora bien, pregunto en medio de mi ignorancia: ¿para qué le sirve a la humanidad ir a Marte? ¿Qué ganamos con que unos científicos lo hayan logrado?
Ustedes se imaginan ¿cuántas cosas se pueden hacer en el mundo con 11 billones de pesos? ¿Cuántos hospitales, fuentes de trabajo, colegios, universidades, se pueden construir? ¿cuánto alimento se puede brindar a millones de niños que mueren de hambre en el mundo entero? Sin embargo, el mundo científico sigue maravillado con semejante “osadía” de los norteamericanos.
Definitivamente estamos muy mal; algún día tendremos que entender que existen prioridades y que esas tienen que mirar al desarrollo del ser humano para que alcance su verdadera dignidad.
La ciencia, como un regalo de Dios, defería dedicarse a luchar contra los diversos males que hoy tiene la humanidad, en lugar de construir armas deberíamos pensar en cómo dar trabajo a tantas personas que no lo tienen, en lugar de ir al espacio a perder millones de dólares, se debería pensar en tantas manifestaciones de pobreza que hay alrededor del planeta, queremos descubrir nuevos mundos sin pensar en mejorar el que ahora tenemos.
Esos recursos económicos deberían pensarse en torno a mejorar el tema del cambio climático que va acabar con el planeta y cuando lo acabemos, por culpa del mismo ser humano, no creo que podamos irnos a vivir al famoso planeta donde la NASA con bombos y platillos anunció que había llegado. Perdonen mi ignorancia, pero así, no podemos seguir…