Quedan pocos días para que se lleve a cabo de nuevo la prueba de estado, y de seguro la mayoría de los jóvenes estarán a la expectativa de lograr su ingreso seguro a la universidad, bajo la nueva modalidad de matrícula cero.
Aún existe en el pensamiento colectivo de la gente, que salir de una institución educativa privada eleva los costos de la matrícula universitaria, pero eso no es así.
La realidad es que hay varias condiciones que se necesitan cumplir actualmente. Lo primero, que un aspirante a pregrado debe hacer es investigar si la Universidad es una de las 64 que tiene convenio con el Estado y, luego, que ésta ofrezca la carrera que desea realizar.
Una vez se tenga plena seguridad de ello, lo primordial es obtener una calificación alta en la prueba Saber 11°, pues las universidades, por lo general, hacen una selección interna con todos los candidatos que se inscriben, admitiendo a quienes poseen los puntajes más altos, verificando el cumplimiento de otros factores con información que se encuentra en las bases de datos del gobierno nacional como: pertenecer a los estratos socioeconómico 1, 2 y 3 del SISBEN, contrastando con el estrato que aparece en el recibo del agua y/o electricidad; por lo que el costo del pregrado se obtiene exclusivamente por esta vía, y no por el tipo de colegio donde haya finalizado el bachillerato cada aspirante, ni por cuánto haya pagado en él.
Por otro lado, la mayoría de las Instituciones de educación superior privilegia a quienes tengan entre 14 y 28 años, a la población afrodescendiente, indígena, LGTBIQ+, entre otras, según la ley vigente; y así, se concede la matrícula cero.