Un ejemplo que debería adoptar la empresa Telefónica que tiene varias de sus recámaras con tapas metálicas salidas de su formaleta, razón por la que se levanta al contacto con las llantas de los automotores. Una de esas trampas viales está justamente en la calle 25 con carrera 20, donde hace más de quince días el elemento está suelto, lo que ha ocasionado la caída de varios motociclistas. “El peligro es que en cualquier momento uno de los tantos indigentes que por estos días deam-bulan por las calles se cargue la tapa metálica y quede el hueco abierto con el riesgo que ello representa”, dijo uno de los comerciantes de la zona en meción. Es un asunto para que la Oficina de Gestión de Riesgo tome cartas y evalúe la situación.