«En esta ocasión sacaron colchones y otros elementos que el carro recolector no se lleva y lo peor lo hicieron por fuera de los horarios establecidos», afirma el denunciante en su mensaje. Tristemente esta es una imagen que se repite en muchos sectores de la Villa de Céspedes sin que exista hasta ahora quién le ponga el freno, pese a que es una conducta sancionada por el Código Nacional de Policía con multas que alcanzan los 600 mil pesos.