Aunque el contrato único de Condiciones suscrito entre la multinacional Movistar y sus usuarios habla de la prestación de los servicios de Internet y telefonía fija, en Tuluá hay cerca de tres mil clientes incomunicados. La razón, el robo continuado de los cables por parte de delincuenetes y en algunos casos por acciones vandálicas de algunas personas en situación de calle.
La situación está causando perjuicios a locales comerciales, entidades del Estado, estaciones de radio que aún emplean el servicio de teléfono fijo.
Pero lo que más molesta a los clientes es el silencio de la compañía internacional que no emite comunicado alguno para explicar lo que está sucediendo, no solo en Tuluá sino también en otras ciudades del país. Para los usuarios es un contrasentido que una empresa que oferta servicios de comunicación, no tenga una línea abierta para su clientela.
“Es inaudito que uno se comunique con la compañía y que el robo de cable sea la unica respuesta sin ofecer soluciones, pero eso sí el cobro es puntual”, asegura uno de los usuarios inconformes.
Piden unir esfuerzos
Frente a las acciones delincuenciales, las directivas de la empresa Movistar proponen la creación de un frente común de la comunidad, autoridades y funcionarios de la compañía para estar alerta y denunciar a tiempo el robo de cables que afecta la prestación del servicio en varios sectores de Tuluá, el Valle del Cauca y el país.
En un reciente reporte elaborado por Telefónica Movistar, el 74% de los 350 casos corresponde al hurto a los sistemas de soportes de energía, como baterías y plantas eléctricas, de las cuales depende el funcionamiento autónomo de las redes para garantizar la conectividad fija y móvil en ciudades, localidades y carreteras cuando falla la energía convencional. Asimismo, más de 70 mil hogares en Colombia se han visto afectados por hurtos a las redes individuales.
“Trabajamos de manera decidida para enfrentar esta problemática que ha llegado a ser tan grave que un solo hurto que la delincuencia comete a una red primaria llega a afectar entre 900 y 1.200 usuarios, el equivalente a una población entera que se queda sin servicios de llamadas ni internet, lo cual es aún más sensible en este momento en el que las comunicaciones son esenciales para la reac-tivación económica y social del país”, indicó Fabián Hernández, Presidente CEO de Telefónica Movistar Colombia al medio digital Libreta de Apuntes.