Aunque el covid es una amenaza que aún sigue latente, los avances en la vacunación y la baja en los contagios y de ocupación de las salas UCI permiten que los actos masivos y las procesiones regresen para el 2022.
DATO: Las procesiones del Santo Viacrucis y del resucitado son las más esperadas por los fieles católicos.
En el caso de Tuluá y la región las diferentes parroquias se han alistado para que la Semana Mayor, que rememora la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazareth, se viva con la intensidad de años atrás.
El jueves con la ceremonia del lavatorio de los pies y la hora santa y el viernes, con el Santo Viacrucis que volverá a recorrer las calles de barrios, veredas y corregimientos, la procesión de la Dolorosa, hacen parte de la programación.
El sábado tiene como evento central la vigilia pascual que marca el momento más importante de la celebración al cantar de nuevo el Gloria como señal que el Señor ha resucitado.
El domingo volverán los fieles a las calles para tomar parte de la procesión con Cristo Resucitado.
En sus diferentes mensajes, los prelados de la iglesia han insistido en vivir estos días con fervor, recogimiento y oración. Haciendo además un acto de contricción de corazón y orando por el fin de la pandemia y las guerras del mundo.
“Como párroco de San Bartolomé llamo a los fieles a celebrar estos días santos, recordando a nuestro Señor Jesucristo que se abajó para redimir a la humanidad, desatando las cadenas del pecado”, dijo el sacerdote Luis Mario Larenas.