Y es que los amantes de la velocidad, buena parte de ellos menores de edad, se han tomado por asalto vías como la Avenida Kennedy, la carrera 40, las calles de barrios como El Panamericano y la carrera 19, a la altura del Sajonia y Pueblo Nuevo.
DATO: Las multas para quienes sean inmovilizados van desde los 400 a 800 mil pesos moneda corriente.
Aunque no es una práctica nueva y que se ha hecho común en otras poblaciones del Valle y el país, en Tuluá parece haber vuelto recargada después de los meses de pandemia.
Era la hora llegada
Raúl Villada, representante de los estudiantes en el Consejo Directivo de la UCEVA, en comunicación con la sala de redacción de EL TABLOIDE dijo que lo que están viviendo en horas de la noche resulta indescriptible, pues justo cuando terminan las clases empiezan los piques en el entorno del claustro universitario.
“Como se dice en la calle, lo que estamos viviendo es la hora llegada, pues las motos van y vienen, taponan los accesos viales, los jóvenes hacen todo tipo de maniobras sin que a ninguna autoridad le importe”, dijo Villada.
El vocero estudiantil hizo el llamado al señor alcalde para que tome cartas en el asunto. “Yo no sé que nos asusta más, los piques ilegales o la pasividad y permisividad del alcalde que como jefe de policía debe tomar las riendas de la seguridad y garantizarle la tranquilidad a sus gobernados”, añadió.
Acciones de control
En la semana que termina el secretario de Seguridad y Convivencia de Tuluá, Jorge Alexánder Gallego Chávez, dijo que de manera conjunta con la policía, agentes de tránsito, gestores de convivencia y la secretaría de Movilidad se está trabajando en las acciones que sean del caso para ponerle freno a la problemática.
“Ese es un tema que lo tenemos claro y de la mano con nuestra policía y demás autoridades vamos a contrarrestar”, precisó el funcionario en declaraciones a los medios locales.
“Lo que se busca con estos operativos es preservar la vida tanto de quienes se dan cita para competir en plenas vías de la ciudad, como de todos los actores viales, cuya vida se pone en riesgo en cada competencia. En nuestra política de gobierno de Autoridad con Humildad prevalece la seguridad de nuestros ciudadanos por lo que prácticas como estas serán objeto de control por parte nuestra”, aseguró.
Llamado a los padres
El funcionario aprovechó la presencia de los medios, para hacerle un llamado a los padres de familia para que asuman el control de sus hijos.
“Es fundamental que los papás nos ayuden en esa tarea de controlar a sus hijos, pues la mayoría de los conductores son menores de edad”.
“Si los padres nos apoyan en esa tarea, la solución será más efectiva”, dijo Gallego Chávez.
“Lo que pretendemos es que los ciudadanos no se expongan a esos pagos que resultan onerosos y que van a afectar la economía propia o la de los padres, pues en caso que el infractor sea un menor serán ellos los que deban responder”, enfatizó el funcionarío.
Sanciones vigentes
De acuerdo con lo estipulado por el Código Nacional de Tránsito, las personas que incurran en las siguientes faltas: Conducir un vehículo a velocidad superior a la máxima permitida, no acatar las señales o requerimientos impartidos por los agentes de tránsito, transitar en sentido contrario al estipulado, se harán acreedores a una multa de 411 pesos y quien conduzca realizando maniobras altamente peligrosas e irresponsables que pongan en peligro a las personas o las cosas la multa será de 828 mil 100 pesos.
En todos los casos se aplicará la inmovilización de los automotores, que sean identificados por las autoridades de tránsito.