En tal sentido la Conferencia Nacional de Organizaciones Afrocolombianas CNOA resaltó una vez más la importancia de la prevención en todos los territorios a nivel nacional del reclutamiento, uso y utilización de niños, niñas y adolescentes en el conflicto armado, como lo declara el protocolo de la Convención sobre los Derechos del Niño en 2002.
“Son ya más de tres generaciones de niños, niñas y jóvenes colombianos que han nacido en medio de este conflicto armado interno, que ha conllevado la naturalización de las violencias en el país y que le ha dejado más de ocho millones de personas víctimas”, indican las cifras que maneja la entidad y dadas a conocer a través de un comunicado oficial.
De acuerdo con ese diagnóstico que ha sido elaborado sobre el terreno, se estima, que alrededor del 52% han sido niños, niñas y adolescentes, y por lo menos el 25% del total son afrocolombianos, aunque las cifras oficiales reportan subregistros.
Según el Registro Único de Víctimas – RUV, 7.681 niños, niñas y adolescentes han sido víctimas de actividades relacionadas con grupos armados ilegales.
Así mismo las cifras señalan que las amenazas por reclutamiento ilícito o vinculación de menores de edad a grupos armados han sido una de las principales causas del desplazamiento forzado en el país. Alrededor de 112.700 personas han declarado que tuvieron que abandonar sus territorios por causa del acoso al que estaban siendo sometidos.
La campaña en Tuluá
En la Villa de Céspedes la jornada se adelantó ayer viernes con la toma de los diferentes cruces semaforizados, iniciando en el corregimiento de Aguaclara, uno de los sectores que de alguna manera ha sido identificado como un territorio donde los menores son instrumentalizados por los grupos ilegales.
“Porque nuestros niños deben estar en entornos protectores, en la escuela, jugando y ocupando el espacio libre en actividades lúdicas, recreativas; nuestro municipio no es ajeno a este flagelo que azota nuestra zona urbana y rural por lo que esta jornada pretende impactar simbólicamente a la comunidad a fin de generar conciencia del deber de proteger a nuestra niñez y adolescencia, para evitar el reclutamiento” dijo Luz Amanda Jaramillo, funcionaria de la Secretaría de Gobierno.