Es una tarea que se cumple hace 23 años y en este 2024, a pesar de presentar quebrantos en su salud no claudicó y el martes 19 de noviembre cumplió la cita con los niños.
En esta ocasión, fueron cerca de 300 regalos los que se entregaron a los pequeños en una mañana animada por el payaso Chispita, la compañía de su hija María Alejandra, que se convirtió en el ángel de Navidad en la campaña, pues según lo relata su madre asiste a las jornadas desde cuando estaba en el jardín.
Cómo nació la campaña
Lo que pocos saben es que esta actividad, que por efectos del calendario escolar se hace en noviembre, nació el día que sentada en la comodidad de su hogar vio una película que mostraba a un niño que deseaba tener un árbol de Navidad en su casa y ante la falta de recursos decidió dedicarse al reciclaje hasta reunir el dinero para hacer realidad su sueño.
“Ese día se activó en mí el querer hacer algo por tantos niños que añoran una fiesta navideña, un dulce, un regalo y no lo pueden tener” relata la profe Ligia, como la llaman sus alumnos que hoy son sus aliados en la noble causa de hacer felices a los pequeños.
En un principio, los regalos eran básicamente dulces y detalles muy pequeños, pero en los últimos años, la generosidad de los tulueños empezando por sus compañeros de labores, ha permitido que los regalos sean más grandes, pues hasta bicicletas le entregó este año a los niños que llegaron a las nuevas instalaciones del colegio Industrial.
“Solo me basta agradecerle a Dios por esta nueva jornada y si él me presta vida y salud por acá estaremos en el 2025”, precisa la educadora.