El montaje de los aparatos, que cada día son usados por cientos de tulueños, suponía que en adelante la Administración Municipal les haría el mantenimiento pero eso nunca pasó y el deterioro se hizo presente.
Al abandono por parte del Estado local se suma la indolencia e incultura de los ciudadanos que no le dan el uso adecuado a los aparatos, lo que ha aumentado los daños de los equipos.
Y como si fuera poco, al abandono y la incultura se suma ahora la delincuencia que se está robando los elementos mecánicos.
De hecho, este informe gráfico se motivó al recibir en nuestra redacción la fotografía de una persona que arrancó de su base la máquina de la Alameda del Río, a la altura de la harinera, y se paseó con ella por las calles de la ciudad, pues fue captada en cercanías al puente de las Brujas sin que ninguna autoridad se diera por enterada.
Ojalá que esta denuncia no se quede en veremos y que se acometa la reparación de los juegos existentes y recuperar los robados. Es hora de actuar.