Aunque la construcción de la nueva sede de la escuela Francisco José de Caldas, ubicada en el barrio Salesiano, culminó a finales de 2023, no ha sido posible que seis meses después, los estudiantes que se encuentran hacinados en la Julia Becerra, ocupen las nuevas instalaciones.
Por esa razón y cansados de esperar, en la semana que termina los estudiantes de los diferentes grados decidieron salir a las calles y exteriorizar su malestar con una marcha que culminó frente a las instalaciones de la alcaldía local.
Para los líderes estudiantiles no es justo que seis meses después, la sede siga inhabilitada mientras que ellos pasan las verdes y las maduras, hacinados en una sede donde las condiciones para estudiar rayan con lo inhumano.
“Hemos sido pacientes y sabemos de las gestiones de nuestro rector, pero ya no aguantamos más y exigimos que nos retornen a nuestra sede tradicional”, indicaron voceros de la protesta.
Respuesta oficial
Como parte de las acciones que se han desarrollado, se llevó a cabo una reunión en la Secretaría de Educación Municipal, con la participación del titular de ese despacho, Francisco Girón Ocampo y el licenciado Alvaro Guzmán, rector de la Institución Educativa María Antonia Ruiz, donde se informó que las nuevas instalaciones de la institución educativa ya están a disposición de la comunidad.
Además, se aseguró que las instalaciones no representan ningún riesgo para los alumnos. En colaboración con la Policía Nacional, se garantizó que la sede está libre de cualquier material bélico o peligroso.
Durante la reunión, también se discutió el progreso en la contratación del mobiliario para esta y otras sedes educativas. La Secretaría de Educación se comprometió a que todo el equipamiento será instalado en las próximas semanas para garantizar de esta manera el retorno de todos los estudiantes.
“Estamos esperando que se entregue la sede, falta el mobiliario, el cual está pendiente para entregar; en este momento se está haciendo el aseo respectivo”, dijo el licenciado Guzmán.