La alcaldía ultima los detalles para entregar el escenario a los tulueños.
La flora también había sido duramente golpeada al desaparecer las zonas verdes y algunos árboles de la misma manera presentaban problemas fitosanitarios, a tal punto que uno de ellos debió ser arrancado de raíz para ser reemplazado por una ceiba que por estos días ya abandonó los cuidados intensivos, está en intermedios y se espera que prontamente vuelva a tener su ropaje de hojas verdes.
Por estos días el tradicional escenario que otrora era el punto de encuentro de las familias ya empieza a tomar otra cara con el verdor y el colorido de los jardines que se plantaron en las materas antiguas y en las nuevas y el monumento que elaboró el maestro James Moncada aguarda para ser destapado.
“Ha sido un trabajo arduo que nos tiene muy contentos, pues logramos generar algo que para muchos era complicado y era crear sentido de pertenencia para iniciar la intervención y al ver los resultados se siente alegría pues son muchas las personas y empresas sumadas a esta causa de tener en Tuluá, el parque más bonito del Valle”, afirma el alcalde John Jairo Gómez Aguirre.
Una vez se de apertura, los tulueños y visitantes que la recorran se encontrarán con varios murales pintados por jóvenes artistas tulueños y que rinden homenaje a personajes, sitios y actividades que han identificado históricamente a los tulueños.
La estatua que rinde homenaje al libertador Simón Bolívar ya no estará solitaria de cara a la Casa de las Tribunas y ahora estará rodeado por un jardín que le devuelve algo de la grandeza que perdió cuando en 2008 lo bajaron de su pedestal de mármol de carrara.
“La tarea es que ahora que se abra, todos nos apropiemos de este espacio, lo cuidemos y lo tratemos como el patrimonio que es”, dijo Adriana Caicedo Castillo, gestora Social de Tuluá y quien no se pierde detalle de los trabajos que están a punto de terminar.