Esta iniciativa, liderada por el Gobierno Nacional, tiene como propósito ofrecer mayores oportunidades a los jóvenes en condiciones socioeconómicas vulnerables, facilitando el proyecto de vida para aquellos que prestan servicio militar o son reservistas de primera clase, además de exaltar la legitimidad institucional y las capacidades que tiene el Ejército Nacional.
Para tener en cuenta
Es importante mencionar que los aspirantes deberán cumplir con los rigurosos estándares de ingreso a la carrera militar, donde no solo recibirán una formación integral en tácticas y estrategias militares, sino que también serán preparados para portar con honor el uniforme del Ejército Nacional, bajo la premisa del respeto a la dignidad y los derechos humanos en la formación de los soldados profesionales.
Los beneficiarios
El decreto señala que el beneficio de la gratuidad en el proceso de incorporación está dirigido a quienes ostenten la calidad de reservistas de primera clase en los términos de la Ley 1861 de 2017, para aquellos jóvenes que se encuentren prestando el servicio militar y deseen continuar en la Fuerza. Este beneficio solo podrá otorgarse una vez.
Igualmente, el decreto destaca que en el proceso de incorporación se dará prelación a los aspirantes clasificados dentro de los parámetros establecidos por el Sisbén en el grupo A (población en pobreza extrema), grupo B (población en pobreza moderada) y grupo C (población vulnerable), o la herramienta de focalización que haga sus veces.
Mientras que, para la selección de los reservistas de primera clase se dará consideración especial a aquellos colombianos que prestaron el servicio militar.
Con la implementación de esta política se busca asegurar que todos los interesados tengan las mismas oportunidades, basándose únicamente en sus méritos y capacidades.