“Cuando entregaron la obra nos dio mucha alegría, pero desde hace treinta días más o menos estamos en medio de una preocupación, pues levantaron el pavimento y nos de-jaron los hue-cos ahí y se convirtieron en una piscina”, dijo la denunciante que pidió la reserva de su nombre.
Agregó que ya se han presentado accidentes donde un caballo resultó lesionado de gravedad y “nuestra mayor preocupación es que los fines de semana por acá pasan los muchachos cuando van de regreso de las fiestas, lo que aumenta el riesgo”.