Esa condición hace que Raúl León, presidente de la junta de acción comunal de esa Urbanización, de la cual hacen parte los barrios Ecoguayacanes y Portales de Guayacanes, se sienta orgulloso y motivado para seguir trabajando en pro de su desarrollo.
De acuerdo con algunos datos históricos, la Urbanización Guayacanes tiene algo más de 30 años y su nombre se debe a que en el terreno vendido por un particular para las soluciones de vivienda había plantado árboles de la especie que le dan el nombre al sector, árboles de flores amarillas, rosadas y rojizas que son su principal característica.
Buen vividero
“Ese es un barrio bueno, tranquilo, de gente trabajadora y honesta que siempre está dispuesta a respaldar las causas en pro de los demás y eso es algo motivante para mí como líder comunitario” dice con orgullo el profesor León, quien tiene desde hace varios años una escuela de fútbol que reúne a niños de diferentes edades y categorías en torno a la pelota y varios de ellos hoy formados en la cantera ya prueban suerte en equipos del rentado nacional y seguramente varios de ellos serán noticia en las canchas del mundo.
Las necesidades
Al preguntarle al líder comunitario cuál es la mayor necesidad del barrio o de la urbanización, como prefiere que lo llamen, afirma que es la falta de pavimento y se pregunta cómo es posible que luego de casi 30 años, la mayoría de sus calles estén sin pavimentar.
Destaca que el gobierno anterior, que presidió John Jairo Gómez Aguirre, pavimentó a todo costo varias calles, especialmente las que llevan hacia la Unidad Deportiva Dinastía Solís, donde se levanta impetuoso el coliseo de pesas Aymer Orozco, espacio que comparte con la cancha de fútbol donde diariamente lleva a sus dirigidos.
Dispuestos al 50/50
De acuerdo con Raúl León, la mayoría de habitantes de la urbanización están dispuestos a sumarse a la propuesta del alcalde Gustavo Vélez quien, en días pasados, anunció a través de un Facebook Live que acudirían al modelo de pavimentos comunitarios para intervenir los sectores.
“No de ahora, sino desde siempre, la comunidad está dispuesta a trabajar en pro de tener las calles pavimentadas, pues sabemos que no solamente van a mejorar la movilidad y la calidad de vida sino también darán una mayor valoración de la propiedad a la hora de vender”, afirma el dirigente.
Asegura, que ya se remitieron a la alcaldía varias cartas expresándole al mandatario de turno la plena disposición de aceptar ese modelo de pavimentación y esperan que prontamente se convierta en una realidad.
Escombros, dolor de cabeza
Como todo no es color de rosa, para los habitantes de la Urbanización Guayaca-nes, la mayor dificultad la representa hoy la mala actitud de los carretilleros o conductores de vehículos pequeños que han convertido el sector en una escombrera, a tal punto que tienen despare-cido un tramo de la transversal 23 (ver foto parte inferior), una vía que viene desde la Urbanización El Lago, pasa por Nuevo Farfán y que una vez terminada los conectará con la vía que comunica a Tuluá con Tres Esquinas, pues sale a pocos metros del santuario del Señor del Descendimiento o Santo Aparecido.
“Aprovechando esta visita de EL TABLOIDE, le hago el llamado a la Secretaría de Hábitat para que programe una jornada de trabajo en el sector y recuperemos la movilidad, pues los escombros y la oscuridad reinante hace que muchos no transitemos por allá”, afirma el dirigente.
Mayor masificación
La Urbanización Guayaca-nes se da el lujo de contar en sus predios con dos escenarios como el coliseo de pesas y la pista de patinaje, dos espacios que le cambiaron la cara a esta zona del sector occidental.
“Lo que desde mi experiencia propongo, con todo respeto, es que se trabaje en programas de masificación, pues este espacio de noche queda subutilizado”, puntualizó.