El corregimiento limita por el norte y por el oriente con el perímetro urbano del municipio de Tuluá, por el sur con el corregimiento de San José (San Pedro), y por el occidente con la vía de Palomestizo a Ingenio San Carlos.

Es una de las despensas agrícolas de la Villa de Céspedes y aunque no escapa a la influencia de la caña de azúcar todavía quedan muchos habitantes dedicados a la siembra de cultivos pancoger, frutas y hortalizas.

Este sector de la ruralidad tulueña es uno de los que se ha transformado en el último lustro, producto de la expansión de nuevos proyectos habitacionales, contiguos a las parcelas de los moradores tradicionales y en muchos de ellos se siente el hablado con acento valluno.

A la vía principal que da acceso empalmando con la avenida Kennedy y que llega hasta el centro del caserío solo le faltan 320 metros para quedar totalmente pavimentada y por eso uno de los anhelos de sus habitantes es poder contar con la carretera en perfectas condiciones.

Carlos Monedero, líder comunitario del citado corregimiento, reconoce que a través de los años los alcaldes que han pasado por el municipio han puesto su granito de arena y eso ha permitido el desarrollo del sector en su componente urbanístico y esperan que el naciente gobierno mantenga esa dinámica.

Las necesidades

“En la actualidad estamos luchando por esa obra de pavimentación en la entrada al corregimiento, al igual que obras similares en algunos callejones que hoy requieren de atención por parte del gobierno local y o departamental», dice Monedero en su entrevista con EL TABLOIDE.

Otros requerimientos

A la par de las obras de pavimentación los habitantes de Campoalegre están a la espera que se haga realidad la construcción de un nuevo puesto de salud, pues del antiguo solo quedan vestigios.

«Como ustedes pueden ver solo hay unas paredes, el techo se desapareció y hoy los residentes en Campoalegre tenemos que ir hasta el hospital Rubén Cruz para una mínima atención», asegura.

La ruta del maíz

Otro de los propósitos de los líderes comunitarios de esta zona rural, con el apoyo de la Administración, Agricultura del Valle, Cámara de Comercio y otras organizaciones, es reactivar la llamada Ruta del Maíz.

«Esa es una buena iniciativa que se tuvo en su momento y que se ha venido a menos, pero sería muy importante ahora que se requiere de la reactivación económica, se avivara, alimentara y pusiera de nuevo en marcha la Ruta del Maíz, pues permitiría dar a conocer que lo producimos los campoalegreños, mucho más ahora que el desarrollo vial ha mejorado», enfatiza Carlos Monedero.

Carlos Monedero – Líder Campoalegre

¿Qué es lo mejor de Campoalegre?

Muchas cosas. Empezando por la gente, los paisajes, la gastronomía, se transpira alegría y somos gente de paz.

¿Qué le cambiaría?

Nada en absoluto. Creo que antes debemos trabajar entre todos para recuperar las tradiciones, pues Campoalegre no escapa a la modernidad se requiere volver al calor de las familias en sus hogares.

La construcción de un nuevo puesto de salud es una de las necesidades más sentidas.

Solo faltan 320 metros para que la vía de acceso quede toda pavimentada.